Lo primero daros las gracias a Momo, Sommer y Tawaki por haber preguntado por mi y haberme felicitado las fiestas de navidad en su momento... Os pido disculpas por no haberos contestado entonces. El caso es que me fui ahí a España a pasar las navidades y desde que volví de allí he estado que no he parado en el trabajo y los pocos días de descanso que he tenido he intendado estar lo más lejos posible de un ordenador. Han sido unos tres meses bastante jodidos.
Solo tuve un fin de semana excitante con una aventura que me surgió a última hora. El caso es que estaba a punto de irme a casa cuando se acercó un compañero todo apurado proponiendome ir a pasar el fin de semana a tres horas de Toronto a andar sobre la nieve con raquetas y al día siguiente ir montar en trineo tirado por perros (su novía se había puesto mala y ya tenian reservado la excursión...) He de reconocer que por un momento dudé, pensé que iba a ser un rollazo pero menos mal que una vocecita dentro de la conciencia me dijo "no seas tonto, anda ve que te lo vas a a pasar en grande" y así fue. Por cierto a los mal pensados comentarles que no hubo rollo entre mi compañero de trabajo y yo con eso de que me sustituyó por su novia... ja ja ja!!
Nos pusimos en marcha la día siguinte muy tempranito. La verdad es que no empezamos muy bien el vieje. A los veinte minutos de camino no tuvimos un accidente de coche de puro milagro. Nos salvamos literalmente por menos de medio metro. El típico imbécil que se pasa de salida de autopista y quiere rectificar en el último momento. Ese día nuestro ángel de la guarda se ganó el sueldo.
Llegamos al final sanos y salvos al lugar donde habiamos quedado con unos amigos de la persona con la que iba y después de comer no fuimos a andar sobre la nieve con las raquetas. Que chulada eso de atravesar un bosque frondoso con nieve virgen por todas partes e ir abriendo camino. Había bastante nieve, por lo menos para mi, pero según con los que iba, lo chulo es cuando se te hunde la pierna entera en la nieve y apenas puedes dar un paso. Lo dejaremos para el año que bien pues. Esto lo tengo que repetir.
Al día siguiente, era lo de los perros. Nos tuvimos que levantar muy temprano para la excursión, ya que primero te enseñan todo lo relacionado con las órdenes que hay que dar a los perros: "easy woooo" que es para que los perros que se paren, "ready, go!!" para que inicien la marcha, "haaa"! era para que girasen a la derecha, y para que que girasen a la izquierda ... mecachis, no me acuerdo.... Estas órdenes más unos consejos de seguridad, como encganchar e los perros y demás fue lo que nos explicaron antes de dirigirnos a donde estaba los perros...
Cuando llegamos al sitio madre mía!! .... Allí había más de trescientos perros por lo menos. Era todo un espectáculo. Lo único que me decepcionó fue comprobar que no todos los perros eran esos huskies de ojos azules... Había bastantes chuchos... incluso tenían hasta galgos!! Que yo decía, "pero si estos pobres apenas tienen pelo para el frío"... pues si, hasta galgos tenian. Es más en mi trieno nos colocaron a uno.
Todos los perros estaban en su caseta y lo que teniamos que hacer era coger los perros que asignaban a cada trieno, buscarlos entre los trescientos perros y llevarlos al "team" que correspondía. Era un trabajo en equipo, así que entre todos organizabamos un trineo detrás de otro. Primero había que coger a los lideres, que son los delante, luego a los del medio y por último a los más fuertes que son los que están detrás del todo. En general la mayoría de los perros estaban la mar de contentos cuando los ibas a coger. Tenian una ganas locas de ir a correr por ahí pero otros, los pobres, no tenían ninguna gana y hacían lo que podía para escabullirse!!
En cada trineo íbamos dos. Uno el que va sentado (pero que es el que más ejercicio hace) y luego el que lo conduce. En nuetra tanda eramos 7 trienos. Cuando conseguimos que todos estuviesen listos, que tardamos un montón por cierto, empezamos la aventura. Joé como tiran y corren los jodidos!!! Había, que frenarlos todo el rato porque hay que guardar una distancia de seguridad con el trieno que te precede y no hacían más que pegarse a los de delante. Pero era alucinante toda la experiencia. Además el paisaje nos acompañaba y encima estaba nevando a placer. Vamos, la estampa perfecta.
Yo fui primero sentado, y como os decía el que más ejercicio físico hace. Cada vez que el convoy paraba, había que ir corriendo y agarrar a los perros para que estuviese la cuerda tensa y para ayudara a pararlos. Tambien, cuando había una cuesta había que bajarse para que les costase menos... ( a la tercera cuesta seguida casi que me da algo!)
Luego a la vuelta, fui yo el que conduje y que cosa más excitante!! Me lo pasé como un crío. Estos con los que fuimos, organizan aventuras de tres días seguidos o más. La verdad es que me lo pensaré para el próximo año porque que es algo para repetir.
Y como todo lo bueno se me hizo cortísimo pero bueno, mereció la pena. Como mi conciencia decía, je je...
Debajo he colgado unas fotos de la aventura y un par de videos...Espero que los disfruteis!!
Una vista panorámica de los trescientos y pico perros que había allí.
Arriba poniendo los perros en su sitio y debajo ayudando a poner los arneses...que no se estaban quietos ni un segundo...
Debajo imágenes ya en ruta...
En la parada para comer... Este fué nuestro¨"team"
más imagenes del espectacular ruta por la que fuimos...
Debajo un par de videos...Espero que os gusten